monasterio de santa maria de huerta

Cuando vayas de viaje por la Nacional II (actual A 2) no dejes de hacer una parada en Santa Maria de Huerta pues encontraras uno de sus secretos mejor guardados. Aunque el municipio actual se encuentra al otro lado de la autovia debes cruzarla e ir al origen de la poblacion que es el cenobio producto del asentamiento de unos monjes cistercienses. Es un magnifico monasterio gotico perfectamente conservado e impresionante. Es de destacar la cella, la cocina (con su espectacular tiro de chimenea) y en especial el refectorio que es impresionante ademas de perfecto (parece que su construccion se basa en la proporcion aurea). Antes de iniciar la visita o al terminarla no dejeis de pararos en la tienda del monasterio porque tiene los productos artesanales de gran calidad que venden y hacen los monjes en el convento. Os recomiendo el membrillo y la mermelada de manzana y limon. Esta muy cerca de Medinaceli que tambien merece otra visita

merece la pena la visita a este monasterio,hay parking a escasos 100 metros la visita dura aproximadamente unos 45-60 minutos depende si realizas el visionado de un pequeño documental que proyectan el precio de la entrada es de 3€ espectacular claustro en la tienda de souvenir venden productos realizados por los monjes del mismo monasterio y de monasterios cercanos

Nos desviamos a propósito de nuestra ruta más de una hora para hacer una visita a este monasterio del Císter y mereció la pena. Interesante y luminosa la Iglesia. Muy bonito el claustro gótico, una pequeña joya la sala de los conversos, pero lo que más destaca (por sus dimensiones y por la belleza de la escalera que sube al púlpito) es el refectorio: toda una preciosidad que es necesario ver en persona. Los monjes venden licores y todo tipo de curiosas mermeladas. Una visita muy recomendable.

Hay un aparcamiento a unos 100 metros pero si se va por semana no hay problemas de visitas. La entrada cuesta 3 euros y te dan un plano para hacer la visita por tu cuenta porque esta perfectamente señalizado todo el recorrido. Prefiero no hacer una descripción detallada porque es imprescindible visitarlo para entender la forma de vida de la comunidad del Cister. Se complementa la visita con una exposición de diapositivas a determinadas horas del dia donde se explica la vida de la comunidad que consta de casi 30 personas. Siguen el lema ora et labora y por consiguiente reparten el tiempo entre la oración y el trabajo que les reporta beneficios mediante la venta de productos caseros como licores, dulces, confituras,etc. La entrada cuesta 3 euros y destaco para su visión la iglesia con sus altares, la cocina, el comedor o refrectorio y los dos patios interiores. Recomiendo una visita sin lugar a dudas.